Dependiendo del tipo de agresión, o del orígen del golpe, Pantazi nos muestra un par de aplicaciones para cada punto usando técnicas rápidas, con uno o dos movimientos simples que permitan afrontar con éxito este tipo de situaciones, tanto para hombres como para mujeres.
Del mismo modo, el uso de estos puntos de presión tiene en cuenta el aspecto legal, mediante el uso de técnicas que no causan ningún daño visible pero suficiente causar disfunción y dolor de detener al agresor y permiten escapar.
Un ejercicio práctico real que permitirá que incluso los no iniciados puedan desarrollar sus capacidades de defensa.
Si decides golpear, hazlo solamente cuando peligre tu integridad física o la de los demás, hazlo sin precipitación y efectuando el número de golpes necesarios, con serenidad, decisión y precisión.
Revuelve la situación lo más rápidamente que puedas, haz el menor daño posible, si puedes elegir esta opción, y, por favor, no seas un héroe inútil.
Debes tener en cuenta que para usar estos conocimientos contra un agresor hay que tener la seguridad de que no existe otro medio de evitar la agresión y que ésta sea especialmente grave.
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