lunes, 4 de abril de 2011

El Boldo: Te cuida el hígado, pero podría afectar a tu cerebro...

Pasado por agua de boldo: Parece que podría ser cierto. En junio de 2007 la doctora Irene Litvan dijo que el té de boldo mataba las células del cerebro y podía desencadenar un tipo raro y grave del mal de Parkinson llamado PSP. “El té de boldo no se debería tomar. Parece algo común pero es realmente muy tóxico. Hay muchos estudios hechos en Francia, en Alemania, que demuestran la toxicidad de algunas sustancias que posee”, dijo la doctora. Litvan procura también determinar qué tipo de sustancias pueden hacer que una persona con cierta predisposición genética termine por padecer el Parkinson o una variante más compleja y grave, la Parálisis Supranuclear Progresiva (PSP), una enfermedad en la cual los pacientes no responden a los medicamentos. Esas sustancias que pueden desencadenar estas graves enfermedades pueden ser alimentos. Y es allí donde aparece el boldo.De la guanábana al boldo. El boldo es un árbol de hojas perennes que puede medir hasta seis metros y crece principalmente en Chile, aunque también en Argentina y Perú. También se lo cultiva en países europeos y africanos de la cuenca del Mediterráneo, donde se aclimató. El boldo mueve mucho dinero: sólo Chile exporta más de mil toneladas de hojas al año. Su principal cliente es Argentina, seguido de Brasil, Paraguay y España. Las cualidades medicinales de este árbol –un arbusto en realidad- son conocidas desde hace siglos, en especial como estimulante hepático, pero también como diurético, digestivo, sedante y antioxidante. Pero en 1999 ocurrió algo. La neuróloga francesa Dominique Caparros-Lefebvre comenzó a investigar por qué en la isla de Guadalupe, en el Caribe, había un número excepcionalmente alto de casos de PSP y manifestaciones atípicas del mal de Parkinson. De la investigación surgió que un alto porcentaje de esos enfermos de PSP y Parkinson atípico comían con frecuencia los frutos de unos árboles llamados Anona muricata y Anona purpurea, y bebían un té hecho con sus hojas. Las frutas de estos árboles son conocidas como pawpaw o soursop en Guadalupe, pero existen en otros lugares de América. El soursop en castellano es conocido como guanábana y se lo llama graviola en portugués. El siguiente paso fue estudiar la composición química de la guanábana. Se descubrió entonces que esta planta posee unos alcaloides muy tóxicos, como la reticulina y la isoboldina. Sucesivos estudios de laboratorio revelaron que, por ejemplo, la reticulina mata cierto tipo de células cerebrales. En laboratorios, estos alcaloides desataron el Parkinson en animales. “Uno o dos pawpaw al mes durante dos años hacen que una rata tenga parkinsonismo”, dijo Litvan. La doctora Caparros-Lefebvre y sus colaboradores estudiaron luego qué otros plantas consumidas por el ser humano poseen los mismos alcaloides tóxicos. El boldo fue señalado como una de ellas. Otras fueron la fumaria, la hidrastis y la celidonia. Pero, curiosamente, la relación entre el boldo y el Parkinson pudo ser descubierta en Uruguay años antes que Caparros-Lefebvre realizara su celebrado trabajo. Entre 1995 y 1997 en el Instituto de Investigaciones Biológicas Clemente Estable se desarrolló una investigación conjunta entre esa dependencia estatal y dos laboratorios privados, que financiaban el experimento. El objetivo era estudiar si el boldo podía servir para combatir el mal de Parkinson.“Pensamos que el boldo, como es un muy buen antioxidante, podía ser útil contra el Parkinson”, dijo Federico Dajas, médico e investigador jefe del Departamento de Neuroquímica del Clemente Estable. Bajo esa hipótesis de trabajo, el boldo comenzó a ser administrado a un grupo de ratas con Parkinson. Pero los resultados no fueron los previstos. “Las ratas no mejoraban. Algunas se mantenían igual y otras empeoraban”, relató Dajas. Como el efecto del boldo era contrario al planteado en la hipótesis del experimento, sus responsables decidieron suspenderlo antes de que llegara a su fin. Por eso nunca se publicaron sus resultados, ni tampoco se divulgó lo ocurrido. Hoy Dajas sostiene que de lo experimentado no se pueden extraer conclusiones válidas para los humanos. Por un lado la experiencia no se terminó. Por otro lado, “de lo que ocurre con las ratas es muy arriesgado inferir una conclusión clínica porque las ratas reciben dosis muy altas”. También destacó que no todas las especies animales reaccionan igual ante los alimentos. La doctora Ofrenda de Medina, integrante del grupo de trabajo sobre Parkinson de la Sociedad de Neurología, dijo que las investigaciones de Caparros-Lefebvre y las denuncias de Litvan son datos sobre los que hay que “esperar una confirmación”. De todos modos se alertó sobre el consumo imprudente de hierbas supuestamente medicinales.“Lo principal es que la gente sepa que las hierbas pueden no ser inofensivas. Hay que asesorarse, porque algunas son muy tóxicas”.La doctora Salomé Fernández, integrante del CIAT y experta en toxicología, dijo que “aunque son pocas las especies vegetales cuya toxicidad intrínseca es elevada, la administración reiterada de dosis elevadas de una planta aparentemente inocua puede ser nociva. El boldo, por ejemplo, tiene ascaridol, una conocida sustancia tóxica, peligrosa si se la ingiere en demasía o por período prolongados. Por eso, en varios portales de Internet dedicados al uso de hierbas o a la información sobre medicamentos se advierte que el boldo no puede beberse en forma permanente.“No se recomienda el uso del boldo durante períodos de más de cuatro semanas ni tampoco el uso del aceite esencial de boldo debido a la presencia de sustancias como ascaridol y 4-terpineol, que son tóxicas e irritantes”, dice Portalfarma.com. También se agrega que “el boldo no debe usarse durante el embarazo debido a la presencia de ascaridol, que es una sustancia tóxica que puede producir efectos adversos en el feto”. En la página web del doctor Alberto Cormillot se sostiene que el boldo no debe ser consumido por “pacientes con obstrucciones en el tracto biliar o con enfermedad hepática severa”. También que “dosis muy altas pueden causar parálisis”.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

psp? crece un psp vita en mi cuerpooo?

Artero dijo...

mario
buenas noches
estuve leyendo el articulo
y me contacte con irene x internet
le pregunte sobre el mismo y te mando su respuesta para
ver si podes mandar a tus contactos una nota aclaratoria
por que lo escrito mas abajo no es exacto lo que ella quiso decir
como para hechar luz sobre el asunto

desde ya muchas gracias
saludos
fede, tigre, bs as, arg

Primero dejeme aclarar que yo no hago investigaciones sobre el boldo,
mi investigacion es sobre una fruta que se llama pawpaw, que es un
nuevo cultivo en USA, y que es de la misma familia que otra que crece
en el tropico (isla de Guadalupe) que tiene multiples nombres (en el
centro y norte de Sudamerica se llama guanabana) y se ha asociado en
dos estudios epidemiologicos con una enfermedad neurodegenerativa
parkinsoniana que yo tambien estudio (PSP).

En los paises de centro
(por ejemplo Mejico) y norte de Sudamerica (por ejemplo Colombia) se
come esta fruta, se ingieren jugos, helados y te de guanabana.

Cuando hable en radio Sarandi, la investigadora que estaba trabajando
en la isla de Guadalupe, Dra Caparros-Lefebvre, me habia dicho y ella
habia publicado un capitulo en el que decia que qu en sudamerica le
llamaban boldo a la misma planta, pero luego he visto que el boldo
viene de plantas diferentes.

No conozco experimentos con boldo y
toxicidad y no se ha asociado que yo sepa a ninguna enfermedad
neurologica.

Por otro lado, un reporte de la European Food Safety
authority del 2009 (pagina 73) pone al boldo como potencialmente
toxico pues contiene uno compuesto, tetrahidroisoquinolona que esta en
la fruta tropical de Guadalupe y en otros estudios se demostro que es
tambien toxica para las neuronas y en modelos animales tambien produce
parkinsonismo.

Si bien el te de boldo podria ser potencialmente
toxico para las neuronas, lo que no se sabe es cuanta cantidad de
compuestos potencialmente toxicos hay en un te de boldo y cuantos años
uno tendria que tomarlo para que sea toxico. Debe de llevar años para
que un te que normalmente tiene pocas cantidades de una fruta sea
toxico, pero por prudencia no tomaria boldo y esto es lo que afirme
cuando hable en la radio Sarandi y sigo pensando a pesar que no haya
de momento datos al respecto.

Cuando hable en la radio Sarandi no fui
tan tajante, pero un reportero de una revista saco esto fuera de
contexto y exajero todo lo que yo dije en el reportaje.

Lo contacte
para aclarar y decirle que estaba en desacuerdo con lo que habia
escrito pero el no retrajo nada y yo me olvide del asunto.

Lamentablemente he visto que se ha encargado de difundir esto por
internet de una forma inapropriada. Gracias por difundir mi
respuesta.

Irene Litvan, M.D.
Raymond Lee Lebby Professor of Parkinson Disease Research, Professor
of Anatomy and Pharmacology,
Chief, Division of Movement Disorders,
University of Louisville School of Medicine,
Department of Neurology

Frazier Rehab Neuroscience Institute,
220 Abraham Flexner Way, Suite 1503
Louisville, KY 40202

Unknown dijo...

Deberian publicar como se lo dice en la entrevista no como un periodista sin escrupulos lo entiende gracias por la aclaracion

Patricio Poblete dijo...

La aclaración de Irene amerita que se rectifique el título y el contenido del artículo.

Unknown dijo...

Interesante acalaraciòn. Hay que tener cuidado con los comentarios de los periodistas, siempre cambian todo.