lunes, 15 de septiembre de 2008

Accidentes fiesteros: Como prevenirlos y/o enfrentarlos.

Ahogo o sofocación por atragantamiento de alimentos, intoxicaciones, cortes por “hilo curado” o manipulación de elementos cortantes y quemaduras debido al contacto directo con parrillas y otros enseres de cocina son algunos de los accidentes más comunes que ocurren durante las celebraciones de Fiestas Patrias. Sepa cómo tratarlos y prevenirlos.
Los festejos del 18 de Septiembre traen aparejados, lamentablemente, algunos accidentes propios a dichas celebraciones, por lo que es necesario conocer cómo actuar frente a ellos y, más importante aún, cómo prevenirlos.
Según la enfermera del centro de formación técnica ENAC, Margot Aránguiz, uno de los más típicos es lo que sucede cuando se ingieren trozos muy grandes de carne y estos llegan a obstruir la vía respiratoria. Para prevenirlo, hay que poner énfasis en cortar el alimento en trozos pequeños, con especial cuidado de que los niños también lo hagan. Además, es importante tomar el tiempo necesario para masticar bien la comida.

Sin embargo, es primordial actuar inmediatamente porque en pocos minutos puede ocurrir una obstrucción completa, convirtiéndose en una situación mortal. Ante esta emergencia, hay que aplicar rápidamente una maniobra que se llama De Heimlich en personas mayores. Esta técnica consiste en abrazar al afectado por detrás y, con la mano empuñada, hacer presión en la boca del estómago, generando una tos artificial que permita expulsar el cuerpo extraño.

En el caso de que el atorado sea lactante o menor de dos años, Aránguiz comenta que, en primera instancia, se debe introducir dos dedos en su boca, con objeto de generar arcadas. Si no resultara esta técnica se debe tomar de los pies, ponerlo boca abajo y presionar en la boca del estómago o entre los omóplatos, así se ejerce presión por gravedad y se elimina el objeto obstructor. “Esta maniobra en menores se ejerce sólo durante los primeros 5 minutos, de lo contrario hay que llevarlo lo más rápido posible a un centro hospitalario” agrega.

Otras de las consultas más típicas que llegan a los centros asistenciales en esta época son las intoxicaciones, producidas por transgresiones alimenticias, es decir, por comer más de lo habitual; por consumo de alimentos en mal estado, mal cocidos o por descuido en la manipulación de éstos, además del consumo excesivo de alcohol.

En este sentido, para aquéllos que pretenden disfrutar de las tradicionales fondas, asados, mariscales o alimentos típicos de estas fiestas, Aránguiz recomienda tener especial cuidado en consumir alimentos cocidos, como también fijarse en que el local donde se va a comer cuente con las medidas básicas de higiene, calidad y manipulación de alimentos. “Las intoxicaciones suelen causar dolores abdominales (cólicos), fiebre, vómitos y algunas veces fiebre” señala. En caso de que la persona presente alguno de estos síntomas, “no descarte llevar al afectado a un servicio de urgencia. Mientras eso sucede, se debe hidratar a la persona, dándole agua hervida en forma constante y en bajas cantidades” agrega la enfermera de ENAC.

Elevar volantines también es una costumbre muy típica en septiembre, pero hay que tomar algunos resguardos para que esta sana entretención no traiga consecuencias indeseadas. Es fundamental que los adultos enseñen a los menores a evitar el uso del llamado “hilo curado”, que puede provocar graves cortes en el cuerpo. En caso de esto suceda, se debe llamar a una ambulancia e inmediatamente cubrir la zona que sangra y presionar fuertemente. También hay que evitar elevar volantines en áreas con tendido eléctrico, por el peligro de electrocución o, bien, que el menor se caiga desde una gran altura al tratar de recuperar su volantín que quedó atrapado entre los cables. Frente a un posible accidente de este tipo, también siempre se debe considerar llamar a una ambulancia, tras ello, verificar que la persona esté consciente, no movilizarla y preguntar en qué zonas del cuerpo siente dolor.

Los casos de quemaduras también aumentan en esta época, debido al contacto directo con parrillas y otros enseres de cocina. Por ello, es fundamental mantenerse vigilantes para que los niños no ingresen a lugares donde se manipulan ollas calientes, hornos encendidos y agua o aceite calientes. “En caso de quemadura se debe echar bastante agua helada en la zona afectada para frenar la introducción de calor en la piel, y después de unos minutos, con sumo cuidado, sacar la ropa – o romperla incluso si es necesario – y cubrir con un paño limpio. De inmediato, llevarlo a un centro asistencial” concluye Aránguiz.

ACCIDENTES: COMO PREVENIRLOS Y/O TRATARLOSAtragantamientos: Prevención: cortar los alimentos en trozos pequeños y masticarlos bien.
Cómo actuar: a través de la Maniobra de Heimlich que consiste en abrazar al afectado por atrás y hacer presión en la boca del estómago. En lactantes, provocar arcadas o ponerlos boca abajo, presionando también la boca del estómago.
Intoxicaciones: Prevención: consumir alimentos cocidos y en lugares autorizados con medidas básicas de higiene.
Cómo actuar: mantener a la persona hidratada, dándole agua hervida en formas constante y bajas cantidades.
Volantines: Prevención: no usar “hilo curado”, ni elevar cerca del tendido eléctrico.
Cómo actuar: en caso de corte llamar a una ambulancia; mientras, cubrir la zona que sangra y presionarla fuertemente. Ante electrocución llamar a urgencia y verificar que la persona esté consciente, no movilizarla y preguntar en qué zonas del cuerpo siente dolor.
Quemaduras: Prevención: evitar que niños entren a lugares donde se manipulan ollas calientes, haya hornos encendidos o parrillas.
Cómo actuar: aplicar abundante agua helada en la zona afectada. Luego de unos minutos sacar la ropa y cubrir con un paño limpio. Acudir a un centro asistencial.
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Fuente: La Segunda Onlîne
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