A.Soussa/Doctíssimo/Yahoo/Tendencias
Increíble el aporte que diversos alimentos,
vitaminas y suplementos
pueden hacer por nuestra visión.
Vitamina A para ver de noche::
En la retina se encuentran dos tipos de estructuras: los conos y los bastones, que transforman la luz en influjo nervioso.
En la retina se encuentran dos tipos de estructuras: los conos y los bastones, que transforman la luz en influjo nervioso.
Más, para funcionar bien necesitan vitamina A.
Las personas que siguen una alimentación pobre en esta sustancia suelen ver mal, sobre todo de noche.
Además, una carencia elevada en los niños puede desembocar en xeroftalmia (atrofia y sequedad de la membrana conjuntiva de los ojos). Esta enfermedad frecuente desde el nacimiento hasta la edad de 5 años es la principal causa de ceguera en los niños.
Aunque a veces resulte necesario un suplemento de vitamina A, lo importante es seguir una dieta que la incluya, con alimentos como el hígado, la yema de huevo, la mantequilla, el atún o el queso roquefort.
Pigmentos para la retina:
Muchos de los pigmentos presentes en la alimentación ya existen en nuestro organismo, los licopenos o los betacarotenos, por ejemplo.
En el centro de la retina existen dos pigmentos particulares: la luteína y la zeaxantina, que cumplen una función esencial, ya que protegen la mácula (el centro de la retina) de la oxidación producida por los radicales libres y del desgaste que ocasiona la luz.
La principal fuente de estos pigmentos son las verduras verdes y las frutas naranjas o amarillas (mandarinas, calabaza, maíz…). Un estudio ha demostrado que consumir cinco o seis de estos alimentos al día aporta una protección óptima contra las cataratas.
ACE para los ojos:
Para proteger la retina, las vitaminas son igualmente esenciales. El trío indispensable es el conformado por las vitaminas A, C y E.
Las vitaminas A y E protegen el ojo de las cataratas, pero también de la degeneración macular vinculada a la edad.
Encontramos vitamina E en los diferentes aceites, el germen de trigo, la mantequilla y la margarina. Pero su efecto protector sólo está garantizado si el consumo de estos alimentos es regular y prolongado.
La vitamina C, por su parte, existe concentrada en el cristalino y lo protegería de la opacificación responsable de la catarata.
Esta vitamina se encuentra en los cítricos, los kiwis y los pimientos.
La miopía, ¿culpa del plato?:
Parece que nuestras comidas también intervendrían en determinados problemas de la vista como la miopía.
Más exactamente, en la miopía evolutiva que, como su nombre indica, se agrava con el tiempo. En este caso, ciertas vitaminas podrían ser beneficiosas, sobre todo la vitamina E.
Otras, como la A y la D también podrían serlo.
¿Cuándo recurrir a los complementos?:
Existen muchos suplementos alimenticios que ayudan a gozar de una mejor salud visual. Pero ¿cuáles son y cuándo deben tomarse?
Lo mejor es recurrir a los que asocian luteína y zeaxantina con antioxidantes como la vitamina C, el zinc y los betacarotenos.
Una cura de omega 3 también puede constituir una ayuda para la retina. Es igualmente posible tomar complementos de manera preventiva, cuando hay fatiga ocular o en caso de degeneración macular vinculada a la edad.
En cualquier caso, siempre es aconsejable consultar con el médico si los problemas de visión persisten.
Y no olvides que los complementos no sustituyen una alimentación equilibrada.
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